¡Gloria eterna a los Héroes de Malvinas e ignominia sin fin a los infames traidores a la Patria!
¡Las Islas Malvinas fueron, son y serán argentinas!
El hecho de que una Nación posea héroes que lucharon y dieron
sus vidas por su Patria, como nuestros soldados que lucharon y murieron en
Malvinas, es un motivo de orgullo para los argentinos todos, pues indica que la
Patria tuvo y tiene hijos valiosísimos, que así como ayer en Malvinas no dudaron
en combatir para recuperar nuestras Islas, así tampoco sus hijos de hoy dudarán
cuando deban defender el honor patrio.
La Batalla de Malvinas fue la gesta más heroica de todas las
gestas heroicas de la Patria, porque fue llevada a cabo para recuperar el
territorio patrio, ocupado por el infame usurpador inglés, que no sabe de
gestos de hombría, honra y valor, sino de atraco, robo, asalto, saqueo y despojo
de todo lo que su avaricia ambiciona.
Los
gloriosos héroes de Malvinas, los soldados argentinos de todos los rangos,
desde el general más encumbrado, hasta el soldado conscripto más bajo en la
escala jerárquica, además de haber lavado la deshonra de la Patria Argentina,
hollada por los invasores ingleses, nos llenan de un sano y santo orgullo,
porque nos demuestran que el valor del dueño que intenta recuperar lo que le
robaron es superior a la cobardía del ladrón, que se apropia indebidamente de
lo ajeno; nos demuestran que la verdad de que las Islas Malvinas son argentinas
es superior a la mentira del robo inglés, y nos demuestran que cuando la Patria
es ofendida, sus hijos más nobles y dignos lavan esta afrenta con su propia sangre.
En
la Batalla de Malvinas se destacaron, de entre todos los héroes, aquellos que
nunca se rindieron, disparando hasta el último cartucho; aquellos que se quedaron
ametrallando a los enemigos, para poner a salvo al resto de los compañeros;
aquellos que arriesgaron sus vidas para salvar la Bandera Nacional, celeste y
blanca, como el manto de la Virgen. A ellos, y a todos los héroes combatientes
de Malvinas, a los que están sepultados en suelo patrio ocupado ilegalmente por
el pirata inglés, a los que murieron en las heladas aguas del Atlántico, al
hundirse el Crucero A.R.A. General Belgrano, a los que combatieron y regresaron
con el dolor de haber perdido la Batalla de Puerto Argentino, a todos ellos,
nuestro mayor agradecimiento, reconocimiento y honor, por haber peleado contra
los enemigos jurados de la Patria, contra los ladrones de tierras ajenas, los
ingleses. A nuestros bravos héroes –y también santos, porque el que muere por
la Patria, muere por Dios, que es Quien nos regaló la Patria-, les decimos: ¡Gloria
eterna a los Héroes de Malvinas!
Que
Nuestra Señora de Malvinas, en cuyo nombre se inició el Operativo de
Recuperación de las Islas, llamado “Operativo Virgen del Rosario”, cubra con su
manto, en el cielo, a las almas de nuestros bravos héroes y santos soldados
argentinos que lucharon en Malvinas, y que a nosotros nos conceda al menos un
mínimo del coraje y valentía que ellos tuvieron, porque la Patria sigue
acechada, por los enemigos externos, que continúan ocupando ilegalmente el
suelo argentino, y por los enemigos internos, argentinos cipayos vendidos a
ideologías populistas y neo-marxistas, que buscan socavar la Patria en sus más
profundos cimientos morales y espirituales, reemplazando su Ser nacional
católico e hispano por una ideología anti-cristiana y neo-pagana. Es decir, los
enemigos de la Patria no son solo los usurpadores e invasores ingleses, sino
también muchos argentinos que buscan quitar el Nombre de Dios y de la Virgen
del alma de la Patria Argentina. Si por haber luchado contra los enemigos
externos, pedimos para nuestros héroes al Altísimo, por medio de Nuestra Señora
de Malvinas y también por la intercesión del Ángel Custodio de Argentina, la
gloria eterna para los Héroes de Malvinas, como también de igual manera pedimos
la ignominia sin fin para los usurpadores y para los infames traidores a la
Patria.
No hay comentarios:
Publicar un comentario